¿Cuántas veces amurallamos las puertas de nuestros corazones por miedo?
¿Cuántas veces decimos no a las mudanzas?
¿Cuántas veces cerramos los ojos para no ver la realidad?
¿Cuántas veces nos callamos por miedo a decir lo que precisaba ser dicho en “aquel momento tan especial”?
¿Cuántas veces bloqueamos nuestros sentimientos con recelo de amar?
¿Cuántas veces dejamos de ser quienes somos solamente para agradar a alguien que jamás nos entenderá?
¿Cuántas veces...?